México exige a Israel aclarar ataque contra delegación diplomática en Cisjordania
La delegación atacada incluía representantes de más de 30 países, entre ellos miembros de la Unión Europea, Reino Unido, Canadá, México, Uruguay, Jordania, Marruecos, Turquía, Egipto, China y Japón.
El Gobierno de México solicitó formalmente a Israel una aclaración por el ataque de sus fuerzas militares contra una delegación diplomática internacional en la ciudad de Yenín, en el norte de Cisjordania ocupada. Entre los presentes se encontraban dos diplomáticos mexicanos, quienes resultaron ilesos.
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) informó que, aunque el ejército israelí justificó los disparos alegando que los diplomáticos ingresaron a una "zona no autorizada", no hay evidencia de dicha invasión ni se emitió advertencia alguna por parte de las autoridades antes del ataque.
México considera que esta acción representa una violación al Artículo 29 de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas, que garantiza la inviolabilidad de los agentes diplomáticos. Al ser firmante de esta Convención, Israel está obligado a respetar sus disposiciones.
La delegación atacada incluía representantes de más de 30 países, entre ellos miembros de la Unión Europea, Reino Unido, Canadá, México, Uruguay, Jordania, Marruecos, Turquía, Egipto, China y Japón. El Ministerio de Exteriores palestino denunció que los disparos fueron un intento de intimidación y difundió imágenes donde se observa a soldados israelíes abriendo fuego en dirección al grupo.
Los diplomáticos mexicanos presentes eran Pedro Blanco Pérez, titular de la Oficina de Representación de México en Palestina, y su representante alterno, Julio César Escobedo Flores. Ambos están a salvo. El canciller Juan Ramón de la Fuente se comunicó personalmente con ellos para confirmar su bienestar y expresarles el respaldo del Gobierno mexicano.
Por su parte, el secretario general de la ONU, António Guterres, expresó su preocupación por el incidente. A través de su vocero, calificó el ataque como “inaceptable” y reiteró que la seguridad de los diplomáticos debe ser garantizada en todo momento.